jueves, 27 de febrero de 2014

Usinas KOLINA: Precios y paritarias

 Las Usinas KOLINA son espacios de participación y producción de conocimientos que buscan 
hacerse con las herramientas necesarias para constituirse como una instancia de síntesis en la 
que puedan confluir la experiencia y el potencial acumulado que van construyendo los compañeros 
en su andar cotidiano, en su transitar hacedor de praxis política.
De la Usina de Economía el siguiente informe y análisis:

Precios y paritarias

“En el mundo actual no es suficiente que el gobierno de los países elija métodos y tome
medidas tendientes a orientar las soluciones económicas. Es menester que el pueblo
participe en ellas y se empeñe en la realización de los planes trazados por el gobierno”
(JDP, 1952).

Dirigentes y analistas coinciden en que lo peor de la restricción externa ya ha pasado, al
menos, por un tiempo prudencial. Luego de un enero caliente en materia cambiaria
donde la moneda nacional se depreció alrededor del 30% y las reservas
internacionales disminuyeron en 2.800 millones, el nuevo valor de convergencia del
dólar junto a ciertos acuerdos y medidas atenuaron las desmesuradas expectativas
alcistas que se habían desatado. Efectivamente, el Gobierno acordó con las cerealeras
el compromiso de que éstas liquiden durante febrero 2 mil millones de dólares so pena de
una intervención directa y más decidida en el comercio exterior. Paralelamente, el Banco
Central retocó la tasa de interés en pesos ofreciendo a los ahorristas un resguardo y
desalentando la corrida hacia las cuevas. También, se obligó a los bancos desarmar sus
posiciones en dólares y el BCRA recuperó su rol comprador en la plaza mayorista como
no pasaba desde hace mucho tiempo. La nueva modalidad para la compra de divisas
para atesoramiento, restituyó cierta confianza graficando estas operaciones una curva
descendente conforme pasaron los días.
Sin perjuicio de los posibles efectos a mediano plazo en el nivel de actividad, sobre todo
por el impacto que pueda traer aparejado el aumento de la tasa, es evidente que el foco
de atención se desplazó desde el frente externo hacia el interno; y en éste son dos
elementos los que tienen más relevancia. Hablamos de precios y paritarias. Tal como
sugerimos cuando hablamos de la inflación y el dólar, creemos que tampoco
podemos hablar sobre precios y paritarias de forma separada. El gobierno nacional está
poniendo un especial énfasis en los precios no sólo a través de su programa insigne
“Precios Cuidados” sino también a partir de un monitoreo exhaustivo en todas las cadenas
de valor (un plus con respecto a los esfuerzos pretéritos). Los consabidos insumos de uso
difundido, cuya producción exhiben una alta concentración, son seguidos de cerca dado
que una remarcación en estos casos desataría un efecto en cadena. Comprendamos que
esta pulseada no se agota en las góndolas como tampoco en sus eslabones previos. La
suerte de un programa como “Precios Cuidados” y del control de precios en general,
puede facilitar el tránsito sobre una pelea distributiva que se presenta escarpada.
La reciente convocatoria del gobierno nacional a los trabajadores organizados fue en esta
dirección. Se los convocó a que junto a la militancia y autoridades municipales y de
diferente índole, coadyuven al Estado en garantizar el cumplimiento de un acuerdo
orientado a proteger la canasta familiar a través de precios de referencia. Esto es,
precios que han sido rubricados por los empresarios como razonables y, por los
cuales, el consumidor accede a una información de primer orden, a un termómetro
que le permite medir qué es lo que está dentro de lo racional y qué es lo que
representa una sustracción injustificada al bolsillo popular. Lamentablemente,
algunos dirigentes gremiales desestimaron este convite sugiriendo que una conducta
como la descripta es responsabilidad exclusiva del Estado.

Los que más incumplen (en cantidad de denuncias)
Carrefour 1223,
Super Vea 527,
COTO 482,
La Anonima 426,
Walmart 385,
Dia % 243

Desde luego que diferimos con esa perspectiva y afincamos nuestra posición en los
fundamentos de Juan Domingo Perón al momento de presentar su Plan Económico de
1952. Contra los que afanosamente pretenden asimilar este 2014 al Rodrigazo de 1975,
nosotros nos permitimos estrechar una comparación con aquél 1952. Perón presentaba
por entonces un programa económico que se proponía sostener las conquistas sociales y
el bienestar cosechado en el marco de un vendaval exterior que impactaba drásticamente
en los precios relativos y en el nivel de exportaciones. Se recordaba los efectos nocivos
acarreados por la inconvertibilidad de la libra esterlina y la discriminación a la que se vio
sometido nuestro país en el reparto de las prestaciones del Plan Marshall. Es decir, ayer
como hoy, los efectos de una estructura económica desequilibrada, de una
industria poco integrada y de un mundo financiero siempre presto a escarmentar
los proyectos de emancipación nacional. En ese marco, Perón convocaba a no
desperdiciar comida, a ahorrar, a “producir, al menos, lo que uno consume”.

“Los hombres y los pueblos que no sepan discernir la relación del bienestar con el
esfuerzo, no ganan el derecho a la felicidad que reclaman” (JDP, 1952).

(Click sobre la imagen para ampliarla)















Fuente: Revista Apuntes para el cambio

Si algo ha caracterizado a este Proyecto Político que nació en 2003, ha sido la obsesión y
el empeño por crear empleo y recomponer el salario. Así fue que se apuntaló el mercado
interno vía estímulo a la demanda, se protegió la industria nacional y se restituyeron las
convenciones colectivas de trabajo a efectos de renovar las virtudes de un ciclo
económico expansivo. Siempre ha primado la libertad y la responsabilidad en la
negociación tripartita. Nadie puede dudar que los frutos de esta decisión se tradujeron en
progresivas mejoras en las condiciones de trabajo y en aumentos salariales. Aumentos
que no sólo fueron nominales. Nadie puede desmentirlo: ni los índices de precios de las
provincias opositoras como tampoco los engendros estadísticos del tipo “Índice-
Congreso”.
La crónica sindical más reciente, nos ha mostrado un cuadro de situación con diferentes
aristas e interpretaciones sobre la actual coyuntura. Acuerdos largos, acuerdos cortos,
cláusula gatillo, vocablos incorporados a una faena política donde los intereses de los
trabajadores (que también son los del país) conviven con ensoñaciones y con intenciones
mal habidas. Creemos que esta renovada perspectiva en torno al cuidado de los precios
ha ganado respeto en el común denominador de los trabajadores. Digámoslo con
claridad: si los formadores de precios injustificadamente trasladan la devaluación
del peso a productos que no tienen insumos dolarizados (y no hacemos nada para
frenarlos), algo similar pueden hacer con los aumentos salariales. Es menester,
entonces, la extensión en el tiempo de estos acuerdos, el monitoreo estatal, la expansión
de los productos comprendidos en la “canasta cuidada” y, reiteramos, el concurso
organizado del pueblo.
Negociaciones colectivas pactadas por actividad. 2006-2012

Negociación colectiva pactadas por actividad. 2006-2012
Gremio
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
UOM
19%
19,1%
32,45%
18%
25%
26,5%
23%
UOCRA
19%
16,5%
19,5%
15,5%
27%
24%
24%
Comercio
19%
23%
20%
$300
27%
30%
24%
Enseñanza
40%
23,8%
19,2%
15,5%
23,4%
22%
19,7%
Estatales Nacionales
19%
16,5%
19,5%
15,5%
21%
24%
21%
Alimentación
19%
16,5%
31%
20%
35,2%
29,6%
27,5%
Salario Mínimo Vital y Móvil
27%
22,5%
26,5%
21%
22,7%
20%
25%
Fuente: Observatorio del Derecho Social CTA

No somos ingenuos. Sabemos que el amotinamiento y la extorsión de las policías
provinciales en diciembre del año pasado, impusieron contranatura un número a partir de
la supina irresponsabilidad del gobierno cordobés al homologarlo. Sabemos esto como
también es de conocimiento público que otros estados provinciales desconocieron lo
arrancado en el contexto de un reclamo violento con ribetes sediciosos. También
sabemos que la corrida contra el peso, el agiotismo y la especulación financiera tienen por
objetivo licuar las políticas sociales y el salario. Que lo intentaron pero que no pudieron
pese a la devaluación de enero.














Fuente: Ministerio de Trabajo y Seguridad Social

Cantidad de Negociaciones Paritarias
por año (2004-2012)
Confiamos en la sabiduría del mundo del trabajo, en la ejercitación de la memoria, en la
representatividad de la abrumadora mayoría del movimiento obrero organizado, en el rol
facilitador del Ministerio de Trabajo. Confiamos en lo mismo que confían los
empresarios y sindicalistas que suscribieron recientemente el documento “Contra
la especulación financiera”. Y, sobre todo, confiamos en el liderazgo de la
Presidenta y en todo lo que todavía tiene para dar este Proyecto Nacional.
“El bienestar, la abundancia y aún la felicidad del pueblo, no es obra de un gobierno, ni
de un grupo de personas determinado, sino el producto de la acción del pueblo mismo”
(JDP, 1952).

lunes, 17 de febrero de 2014

Rejunte de fortunas y economías (a un mes de Davos)

Por Fabián Curotto

Algunos criticaron a Cristina Fernandez por no haber asistido al Foro económico Mundial de Davos. “A Davos van los que buscan la concentración de la riqueza, a la Celac vamos los que no queremos eso” contestó con muy buen criterio el Gobernador de Entre Rios, Sergio Uribarri.

Entre los que objetaron la decisión de Cristina se encontraba el ex dirigente popular Hugo Moyano, quien ya asumió plenamente su rol de referente en la corriente político-empresarial mas conservadora que uno pueda imaginar, aunque este rol sea mas el de un ladero amaestrado que el de un conductor con ideas propias.
Bueno, después de tanto traicionar tampoco se puede llegar con muchas luces.
El ex dirigente popular en cambio saludó con alegría que su aliado Mauricio Macri haya asistido a esa cumbre del poder económico concentrado, en donde se paseo entre un puñado de buenas intenciones y una montaña de economistas neoliberales, políticos conservadores y otros odiadores profesionales de todo lo que sea ampliación de dignidad y oportunidades reales para los mas necesitados de cualquier sociedad.
¿Qué representa Davos realmente? ¿Qué salidas propone para los pueblos? (pues eso es lo que debe importarnos a nosotros).
Algunos abombados decían que Cristina iba a la CELAC pues ahi no habia debate y todos la aplaudian automáticamente: desconocimiento del contexto o mala intención. Es en Davos donde hay en la práctica un discurso único y previsible; en la CELAC hay mandatarios que representan distintas corrientes políticas, y entre los que hay mas sintonía también suele haber matices en sus miradas, lo que hace poner en debate el como construir y afianzar el bloque regional mas allá de esas diferencias o aún con ellas.
Si el año próximo nuestra Presidenta Cristina Fernandez decidiese ir a Davos no borraría ni negaría esta nota; mientras la CELAC siga en su agenda, mientras UNASUR siga en su agenda como objetivo central estaremos complacidos. El tema es que Macri, jefe de Gobierno Porteño y empresario con ambiciones presidenciales, sólo mira a Davos como Meca, sueña con Europa y piensa en Washington... pero nunca, nunca piensa en nuestra región, que es nosotros.

Me gustaría compartir el siguiente informe, para tener dimensión de qué clase de propuestas son las que puede generar un Foro como el de Davos, dada su naturaleza




 ENCUENTRO DE FORTUNAS Y ECONOMÍAS EN SUIZA

El discurso de la recuperación económica es enfriado por la demanda de más reformas.


La crisis económica, vista desde una exclusiva localidad turística de Suiza, es otra cosa. 
Y desde esa perspectiva tendría una pinta halagüeña la recuperación que los gobiernos 
europeos (empezando por el de Mariano Ra­joy) llevan meses anunciando a bombo y 
platillo. 
Sin embargo, a pesar del “optimismo” que según la directora general del Fondo 
Monetario Internacional, Christine Lagarde, “está en el aire”, los participantes del
 último Foro Económico Mundial –acontecimiento que concluyó a finales de enero en 
Davos– han preferido manifestar una cierta cautela; una actitud que esconde la sed de 
“reformas estructurales” que este selecto club siempre ha tenido.
No habrá crecimiento
Así que, mientras Rajoy declaraba “no veo sólo el futuro, sino también el presente con 
esperanza”, los 2.500 personajes, entre banqueros, políticos y hombres de negocios 
llamados a “rediseñar el mundo” –esta era la sencilla tarea de la edición–, 
no se han dejado contagiar por el entusiasmo y han elegido el business as usual
Los negocios como de costumbre.
Una cosa es que millones de personas vuelvan a consumir y otra que los gobiernos 
se distraigan y se alejen del camino de la austeridad, de los recortes y de las 
privatizaciones dictado por Bruselas en acuerdo con el FMI. Y justo los 
“hombres de negro” del fondo se han encargado, unos días antes del Foro, 
de enfriar la alegría de los mandatarios que anunciaban la luz a final 
del túnel de la crisis. Según el FMI, el PIB a nivel mundial mejorará su 
crecimiento sólo un 0,1% con respeto a las anteriores previsiones 
(que lo situaban en el 3,6%).
El dato por sí mismo es una desgracia para un conjunto de economistas 
obsesionados con el crecimiento. Sin embargo, aún peor es la constatación 
de que, a pesar de los avances de PIB en países europeos como España, nadie 
volverá en breve tiempo a la situación de antes de la crisis. Eso significa sólo 
una cosa: que, a pesar de la recuperación, la plaga del desempleo no se va a curar. 
Pero en Davos, entre un mitin y una clase de esquí prefieren centrarse en otras cosas. 
Y si es verdad que las recetas del FMI parecen no cumplir con sus promesas, eso 
se refiere sólo a los anuncios que los gobiernos han suministrado a los electores.
Las que se han cumplido han sido las promesas que los gobiernos –a fuerza 
de privatizar y recortar– hicieron a las élites nacionales y internacionales, las mismas 
que figuran en la lista de los “socios estratégicos” del Foro de Davos. Se trata de 100 
firmas que comparten el compromiso del Foro de “mejorar la situación del mundo”
 y que son una buena representación de las las empresas transnacionales 
más poderosas.
A falta de grandes manifestaciones en la exclusiva localidad –los policías de toda Suiza 
llamados a defender el Foro sólo han autorizado en 2014 un desfile de ecologistas 
disfrazados de zombies–, otras ideas para “mejorar la situación del mundo” tuvieron que 
llegar en Davos a través de la fuerza mediática de las grandes ONG: Oxfam informó de 
es decir, que casi la mitad de la riqueza está en manos del 1% de todo el mundo.
Pero en Davos, donde ese 1% se reúne y debate sobre el futuro de los demás, 
la desigualdad no aparece en la lista de los peligros más urgentes. Christine Lagarde, 
estrella del encuentro, ha declarado que sí está preocupada, pero lo que le agobia, 
además de si habrá más o menos recuperación, son otras dos palabras que empiezan 
con “r”: la primera es “riesgo”, ya que, el FMI tiene miedo de que algún obstáculo impida 
finalizar las reformas financieras promovidas por el fondo; la segunda es “reiniciar”, 
ya que según Lagarde, “el reinicio definitivo son aque­llas reformas estructurales 
necesarias en todos los rincones del mundo”.
Es la misma obsesión de siempre, que la ejecutiva francesa comparte con otros 
incondicionales de Davos: reformas, reformas y reformas. “No es una contradicción 
apostar por la liberalización de los mercados de trabajo y denunciar la creciente 
desigualdad de renta. A corto plazo, quizá sea doloroso, pero a largo plazo generará 
más crecimiento”, explicó a los periodistas Nariman Behravesh, economista jefe de la 
consultora IHS y asiduo del Foro.
Lo que los gurús de Davos no explican es de qué sirven tantas reformas si luego 
la situación de ese 99% sigue estando condicionada por los mercados, es decir, 
por unos cuantos inversores que mueven las Bolsas mundiales. Entre ellos destaca 
sin duda el fondo estadounidense Black­Rock, cuyo consejero delegado Larry Fink 
explica que los vaivenes en los índices de las últimas semanas “son una señal de lo 
que puede pasar este año”. “Creo que viviremos en un mundo con mucha 

más volatilidad”, ha declarado Fink.No importa que la economía se recupere, los inversores continuarán especulando como siempre, y quizá aún más


El laberinto de la economía de las finanzas

Como explica el economista suizo Christian Marrazzi en su ensayo La violencia del capitalismo financiero, el atolladero en el que se encuentra la economía mundial es elaborar una estrategia de salida de la crisis: cualquier medida de estímulo supone una vez más salvar el sector financiero (del que el 99% del mundo es rehén), haciendo vanas las posibilidades de recuperación económica. Esto es el mundo que año tras años Davos ha contribuido a “rediseñar”.


(Fuente http://www.diagonalperiodico.net/)

jueves, 13 de febrero de 2014

Por qué preferimos la Venezuela Bolivariana

Por Fabián Curotto

Convencido estoy del principio de autodeterminación de los pueblos, y como integrante de éste Gran Pueblo -el de La Patria Grande, pues creo fervientemente en ella y en la posibilidad de su construcción- haré algunas consideraciones, mientras sectores muy identificables están tratando de horadar la totalidad de la Revolución Bolivariana, buscando dañar fundamentalmente y mas que nada lo mejor de ella, es decir, sus logros.


Porque la oligarquía no quiere que las oportunidades se socialicen y sean para muchos -y menos para todos-, y elige perpetuar, aun en pleno Siglo XXI, ese coto de privilegios diseñado y reservado históricamente para unos pocos. Claro, mas allá de sus concepciones neoliberales en lo económico no dejan de ser conservadores en lo demás.


La derecha conspira y da zarpazos en cuanto puede. En las últimas horas han matado a un militante chavista, han generado hechos de gran violencia en las calles; y los medios "de desinformación" corporativos cumplieron su rol: el de tergiversar.


El canciller Elías Jaua afirmó hace unas horas que "hay intereses transnacionales para lograr que Venezuela ponga fin al proyecto soberano, independiente, al manejo de nuestros recursos, a la erradicación de la pobreza, del hambre".


Detengámonos en éstos puntos que mencionó sobre el final. 

Sobre manejo de recursos: la soberanía de Venezuela sobre su petróleo y todo lo que a él atañe (explotación, comercialización, etc) es increíblemente alentadora, y Chávez fue quien lo ha conseguido. 
Si nos referimos al proceso de erradicación de la pobreza, el de consolidar dignidad para la población, entre los amplios logros sociales de los gobiernos bolivarianos tanto del Presidente Constitucional Hugo Chavez como del Presidente Constitucional Nicolás Maduro se han entregado más de 500.000 viviendas sociales en sólo 32 meses, por dar un ejemplo. 
En el camino hacia la erradicación plena del hambre los resultados son inapelables, Con políticas activas alimentarias -de distribución, abastecimiento y consumo de alimentos- se han generado mejoras en la calidad nutricional del pueblo venezolano, dicho ésto por la FAO. La ONU dijo, ya sobre finales del pasado año, que Venezuela logró erradicar la desnutrición; esta información es fácil de obtener si buscan en las páginas de dichos organismos.

Ahora bien... convienen a todos éstos logros ? Claramente no. Al sector especulativo, ligado al dólar y a otras timbas, poco le importa que haya mil viviendas mas o mil viviendas menos, si ello no tiene un costado que se preste a algún negocio turbio, o a la ganancia amplia y fácil para el sector privado.

Poco importa que no haya ya niños muriendo de a cientos por el hambre si eso no otorga rentabilidad o beneficio palpable de algún modo a las élites financieras o dé ganancia al desenfreno de algunas ambiciones particulares, pues ese es su credo mas allá de lo que digan los domingos en sus iglesias o frente a sus familias. La solidaridad, la sensibilidad social y la dimensión de lo que significa el prójimo que atraviesa necesidades son cuestiones que no existen realmente en sus corazones, amoldados éstos mas bien al canibalismo "imperial-capitalista".

La oligarquía tiene sus propias lógicas, sus propios objetivos, su poder de fuego corporativo y mediático... y cuenta con eternos idiotas útiles en los cuales apoyarse cuando necesitan soldados para sus filas.


La Venezuela del hambre, la de Wall Strett y Ronald Reagan, quiere volver para negocio de unos pocos... La Revolución de Bolivar y Chavez, la de los resultados concretos en beneficio del pueblo, debe prevalecer y consolidarse.


Tanto en Venezuela, como en Argentina y en cada una de nuestras naciones, la batalla cultural debe darse con argumentos, pues los tenemos. Están los que no entienden todavia de qué hablamos... pero sepan que hay otros que lo entienden perfectamente, y deliberadamente han elegido la trinchera ideológica y fáctica de lo anti nacional y lo anti popular a la hora de proyectar en que tipo de país quieren vivir. 


Pero que luego esos no nos vengan a hablar de la bandera o de La Patria, que tengan la sinceridad al menos de reconocerse huérfanos de esos valores tan caros, y que se asuman como sujetos intolerantes ante avances en lo que respecta a conquistas populares.


Habitualmente ponen excusas vagas para justificarse, ligadas a la corrupción que denuncian siempre los mismos medios de la derecha -llamativamente siempre de la derecha- o por algo que leyeron en la editorial o en las cartas de lectores del diario de Bartolomé Mitre. Notaremos que no les molesta, sin embargo, la corrupción del sector privado; porque salvo que nosotros saquemos el tema, ni lo mencionan.

Lo que no toleran -sean sinceros- son los avances plenos y sostenidos de los sectores que para ellos deben ser felpudo de la clase media y de los sectores mas acomodados, que se les de algún derecho a los necesitados lo toleran... pero no tantos !! Les queda también la excusa de no ser los primeros reaccionarios en su estilo.... pero no les queda mucho mas que esas insustanciales excusas para intentar  justificar el odio que los mueve.



Twitter de hoy, de un fascista venezolano

sábado, 8 de febrero de 2014

La Patria en Peligro

Quiero poner a disposición de ustedes por este medio el texto de  Carta Abierta, consensuado en el día de hoy.
CARTA ABIERTA  / 15
La patria en peligro
No es a menudo que surge esta idea de fuerte raigambre en todas las épocas, recordable en las grandes jornadas libertarias del siglo XIX en Latinoamérica y Europa, que es parte de un llamado urgente y a la vez de una inevitable vocación de activismo. Un puñado de grandes empresas (Cargill, Noble Argentina, Bunge Argentina, Dreyfus, Molinos Río de la Plata, Vicentin, Aceitera General Deheza, Nidera y Toepfer) exportan más del 90% del grano, aceite y harina de soja argentinos, histórica base de la riqueza y la producción del país, han organizado un cepo financiero sobre el gobierno, obligándolo a tomar medidas difíciles y comprometedoras del futuro del país, como la devaluación, más allá de que, en el momento de jaque final, el propio gobierno haya dejado correr esa presión asfixiante del mercado exportador para poder retomar la iniciativa a partir de una devaluación no deseada. Es grave. No es un simple episodio más de la historia económica nacional. Las grandes organizaciones agropecuarias tienen todas fuertes vínculos internacionales, financieros, comunicacionales y siempre están dotadas para producir el espejismo de que sus intereses coinciden con los de una gran parte de las desconcertadas clases medias argentinas.
Lo cierto es que han conseguido forzar e imponer una depreciación del peso no querida por el gobierno ni conveniente para las mayorías populares, y tienen la estrategia de profundizarla a niveles sustancialmente mayores. Hay que reconocerlo y, en un momento particularmente dramático, reponer nuestras fuerzas y dignidad para la lucha, pues esto exigirá grandes esfuerzos para que la devaluación no recaiga en los amplios estratos de las clases populares, históricamente las más perjudicadas con este tipo de medidas. La defensa de los “precios cuidados” es en ese sentido una tarea primordial. Suele verse exageración o grandilocuencia cuando se denuncia que esta situación incita a la desestabilización política, pero lo cierto es que aunque esto pueda no estar en la táctica inmediata de los grandes grupos amparados en las nuevas tecnologías de la globalización, en una sociedad castigada y temerosa, el resultado de sus acciones puede ser imprevisible. Estos sectores provienen de los primeros tiempos de la organización nacional argentina, momentos en que se configuraron como una oligarquía dócil a la división internacional del trabajo, aunque en su seno no dejó de haber impulsos proteccionistas y una apuesta a ciertos modos de intervencionismo estatal en el mercado de granos y carnes, justamente en la época del conservadorismo previa a la irrupción del peronismo y en el contexto de la gran crisis.
Viejos y nuevos grupos, siempre pocos, ahora de mayor espesor y concentración de su economía y específica relación con las políticas vinculadas a las potencias mundiales de esta etapa histórica de la modernidad, asedian al gobierno popular encabezado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que tomó medidas de gran significación para democratizar la sociedad avanzando en la inclusión, la ampliación de derechos y la redistribución de la renta nacional a favor de las mayorías nacionales, tanto de las clases medias como de los sectores más carenciados. Ese asedio es posible porque están pendientes de cerrar los amplios márgenes de maniobra que aún conservan estos grupos monopólicos. Ahora, con nuevas tecnologías de siembra y amparados en grandes fábricas de semillas transgénicas –cuyo uso y regulación debe ser parte de un amplio debate– han reorganizado socialmente el campo de la producción agropecuaria, con trazados tan novedosos que los viejos productores y arrendatarios (de antiguo cuño genuinamente productivo) han decidido asociarse a los horizontes construidos con la expansión de la frontera productiva de la soja, cambiando el perfil de las relaciones económicas y de clases sociales. El modo de propiedad, que para muchos significó hace un siglo protestar contra los latifundios, hoy se expresa en una privatización facciosa de la renta agraria, basada en la hipótesis magna del rechazo ciego a las necesarias intervenciones estatales, como poder público democrático representante de la nación y su equilibrio de intereses a favor de la población más desfavorecida e históricamente castigada por ajustes y teorías sobre las restricciones salariales, como variables compensatorias que tributan al imperio del capitalismo globalizado. Estos actores, concentrados fundamentalmente en la pampa húmeda, se apropiaron de manera excluyente de la denominación “campo”, mientras la mayoría de los campesinos del país situados en otras regiones resisten, porque los amenaza y perjudica, el modelo agrario que aquellos instalaron y cuya intensificación predican.
Es necesario recrear la imaginación histórica de una cadena de acontecimientos que tienen que contar nuevamente con gran apoyo popular. Quienes se sintieron alguna vez llamados por un conjunto de decisiones gubernamentales, cuyos grados de imperfección o de error están y deben estar en discusión, pero que tuvieron clara vocación de autonomía y soberanía nacional y social, y asimismo de justicia emancipatoria en todos los ámbitos de la vida económica, pública y cotidiana, deben nuevamente realizar un examen de su vocación política. Nos esperanza que el resultado de ese examen, hecho por hombres y mujeres que apoyan al gobierno, o que lo apoyaron y se sienten desencantados, o que se guían por trazados políticos que pueden ser secundarios si las cuestiones en juego son mayores (por eso, socialistas, autonomistas, liberales, nacionalistas, radicales, peronistas, izquierdistas, republicanos, son destinatarios de esta interpelación), los haga ser quienes piensen las grandes disyuntivas sociales, sin la neblinosa cortina de cenizas que imparten los magnos catecismos de la piqueta del demoledor o la pala del enterrador. Una gran restauración del viejo país oligárquico está pronta a mostrar sus dientes de hierro, lo que serían sus herramientas de ajuste, que pretenden que, en una transición aleccionadora se empleen como prólogo, por un gobierno que supo tener consecuencia en políticas opuestas a esa lógica antipopular. Vienen con su populismo de turno, sus escribidores de estación, sus periodistas de cosecha unánime, aunque quizás sin sus Juntas Reguladoras del comercio exterior, como sus antepasados, sin embargo, supieron constituir.
Un nuevo estilo movilizatorio, una confluencia de fuerzas grupales e individuales, nuevas ideas para la defensa de lo valioso que significa esta experiencia, que no es una falsía aunque pueda estar rodeada de grandes descuidos, es lo que se reclama. Este proceso transformador, conducido por Néstor y Cristina Kirchner, ha sido una recreación de las militancias y el fervor público nacional, ancladas en una larga memoria popular que no tiene propietarios, con ritualismos tal vez que, no por repetitivos, dejaron de acompañar los procesos populares. El proyecto que se ensayó esta vez, amplio, democrático y plural posee una necesaria juventud que ningún momento histórico debe rechazar, aunque sí emplazar dentro de vastas alianzas sociales, hoy mermadas. Ahora debemos sentirnos a las puertas de una nueva movilización, preparada con responsabilidad y pasos precisos que ramifiquen el llamado. Los temas cruciales que laten en las bocas y corazones podrán convertirse en nuevos cánticos, deberán tornarse motivo de interés masivo por medidas y cambios institucionales trascendentes y necesarios desde hace tiempo, para avanzar en mecanismos que establezcan el manejo estatal del comercio exterior. Nuestro país ha visto cíclicamente amenazados, boicoteados y truncados proyectos de desarrollo nacional autónomo por la restricción externa, es decir, por la insuficiencia de divisas. Estas son el recurso clave para la continuidad y profundización de dinámicas progresivas. Por lo tanto resulta indispensable sustraer la disposición sobre las mismas del chantaje monopólico y garantizar su control gubernamental. Será necesario avanzar en la creación de las instituciones que lo hagan posible, lo que implicará una disputa de intereses que no ahorrará conflictos, razón por la que se impone generar un movimiento de opinión y la movilización social (como ocurrió con la Ley de Medios Audiovisuales) que acompañe la consecución de ese objetivo auténticamente democrático. La soberanía en la disposición de las divisas requerirá avanzar en otras áreas para reforzar o establecer el control estatal y social (por ejemplo, a los puertos privados), mayores regulaciones al capital especulativo y al sistema financiero, especialmente a la banca de propiedad extranjera, entre tantas. Estos objetivos no pueden ser  otra cosa que las banderas de un patriotismo constitucional y social, que vea las acechanzas y dificultades y no se atemorice cuando deba salir al espacio público para señalarlas y conjurarlas.
En este momento de agudo peligro para las esperanzas y el futuro de millones de compatriotas, sentimos la necesidad de este llamado que recoge los ecos de muchas de las luchas encarnadas por variadas tradiciones políticas del país. Escuchemos todos, escuchémonos a tiempo.

ESPACIO CARTA ABIERTA

jueves, 6 de febrero de 2014

El Problema Shell debe ser solucionado

 Por Fabián Curotto

No hablo del problema con Shell, me refiero a Shell como problema. La solución es Shell fuera de la órbita política argentina. Ya no se puede tolerar mas el desparpajo de ésta multinacional pirata, cometiendo injerencia en asuntos políticos y económicos nacionales.


Revisemos el problema con datos y en una línea de tiempo, muy acotada pero significativa:


La Royal Dutch Shell  es una empresa de hidrocarburos anglo-holandesa que tiene intereses en los sectores petrolíferos, del gas natural así como del refinado de combustibles.Es una de las mayores multinacionales del mundo, y una de las cuatro más grandes del sector petrolero.


La dictadura cívico militar iniciada en 1976  provocó deliberadamente la bancarrota del sector público, preparando el terreno para su privatización. Por ejemplo, la principal empresa pública argentina, la petrolera YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales, ahora nacionalizada nuevamente gravias a la voluntad del Gobierno Nacional) fue forzada a endeudarse en el exterior, pese a no necesitarlo en absoluto. En el momento del golpe militar, la deuda externa de YPF era de 372 millones de dólares. Siete años mas tarde, al terminar la dictadura, esta deuda se elevaba a 6.000 millones en esa moneda. Casi todos los créditos quedaron en manos de la dictadura, que además redujo a la mitad las comisiones que iban a YPF por la venta de combustibles para aumentar sus ingresos. YPF fue obligada a refinar el petróleo que extraía en las multinacionales privadas Shell y Esso, aunque dada su buena situación financiera al comienzo de la dictadura, podía haberse dotado de una capacidad de refinación acorde a sus necesidades, complementando la de sus tres refinerías ya existentes. Al final de la dictadura, YPF estaba asfixiada por las deudas. Negocio para las privadas.


1982:  Shell abasteció en plena Guerra de Malvinas a la flota invasora… fue uno de los enormes fracasos de la inteligencia militar argentina, ya que esos buques salían con su carga hacia puertos de Brasil, pero en verdad transferían su carga a buques de otras banderas que finalmente abastecían a la flota enemiga. Como privada eligió no ponerse al margen del conflicto a pesar de tener negocios millonarios también en nuestras tierras. Clarísimo: su identidad pirata tuvo mas peso y  en consecuencia tomó partido. Su combustible puso en marcha los buques que vinieron a matar a nuestros soldados.


Enero 1999: El derrame de petróleo más grande de la historia en agua dulce fue causado por un buque de Shell, en Magdalena, Provincia de Buenos Aires, mas precisamente el 15 de enero. En 2002 el municipio de Magdalena presentó una demanda por casi 35 millones de dólares, a la empresa Shell por daños ecológicos en las costas y aguas del distrito. A cambio del cierre de la causa y desconocer su responsabilidad, Shell ofreció menos de 10 millones de dólares y ayuda al desarrollo de Magdalena. El cumplimiento sólo parcial del irregular acuerdo trajo entendibles conflictos.


Enero 2012: El presidente de Shell "argentina", Aranguren, declaró sin inocencia: "Vaya toda la solidaridad de Shell ante las cada vez más frecuentes amenazas a la libertad de prensa que están (estamos) padeciendo." Estas palabras se las dedicó al diario de derecha La Nación, y eran en contra de la Ley de Medios de la DEMOCRACIA. No es la primera vez que este sujeto se entromete en cuestiones de política interna, siempre a favor de las corporaciones, en contra del Estado.. 


Enero 2014: El presidente de Shell "argentina", Aranguren, El presidente de la petrolera Shell, Juan José Aranguren, a través de los bancos internacionales Citi, Francés y HSBC compró u$s 6 millones y elevó la cotización. La maniobra especulativa consistió en ofrecer pagar al dólar mas caro de lo que valía oficialmente en ese momento, generando deliberadamente  una espectativa concreta en ese sentido. Una coincidencia llamativa entre las tres filiales internacionales involucradas en esta maniobra especulativa, es que los tres bancos en cuestión (HSBC, el Banco Francés y el Citi) tienen como operador de prensa a César Mansilla, presidente de la agencia Nueva Comunicación. Dos tipos concentraron su poder para hacerle daño a nuestra moneda y, en definitiva, al bolsillo de nuestros trabajadores.


Febrero 2014: Aun en medio de la turbulencia financiera que causó, la empresa “Shell y su más alto directivo en el país, Juan José Aranguren, ” efectúan otra maniobra especulativa, extorsiva y atentatoria contra los intereses del país”: Shell aumenta unilateralmente sus productos en un 12 por ciento. Dias despues el gobierno logra desactivar éste aumento, lo que obliga a los piratas a retrotraer sus precios... pero de todos modos los combustibles terminan aumentando alrededor de un 6 por ciento. 


¿Debemos tolerar que ocurra ésto delante de nuestras narices ? Definitivamente no; no puede ser "gratis" tanto ataque a nuestros intereses nacionales. Particularmente los invitaría a irse ya mismo por donde vinieron.


Veremos como sigue esta película, pero invito que -para Aranguren- el final de la misma venga con una moraleja realmente aleccionadora... que el amor venza al odio, digamos.